Una agenda es esencial para un manicurista, ya que les permite organizar citas, dar seguimiento a los servicios programados y gestionar eficientemente su tiempo. Facilita la planificación, ayuda a evitar citas duplicadas y mejora la comunicación con los clientes al mantener un registro detallado de preferencias y servicios realizados. Además, contribuye a la profesionalidad y eficacia en la gestión del negocio.